La técnica de PCR, cuyas siglas en inglés significan “Reacción en cadena de la polimerasa” es una técnica de biología molecular que permite detectar un fragmento de ADN de un patógeno (virus, bacterias, hongos u otro) o mutaciones genéticas que deseamos saber si se encuentran en una muestra clínica (sangre, esputo, biopsia, suero, etc.). Dentro del ADN de un patógeno existen regiones únicas que lo diferencian de otros patógenos, a esta región se le denomina marcador molecular.
Antes de realizar una PCR, se debe extraer el ADN mediante el uso de reactivos que permitan liberarlo de una muestra clínica. Debido a que el ADN es difícil de observar o detectar por métodos serológicos, inmunológicos o microscópicos, se emplea la técnica de PCR. Esta técnica se basa en la multiplicación exponencial de una región de interés del ADN mediante el uso de elementos (enzima, cebadores, nucleótidos) que son específicos para cada patógeno o mutación, y empleando un equipo llamado termociclador. Este equipo va realizar cambios de temperatura sobre el ADN permitiendo que se duplique a un número tan grande que pueda ser detectado por un software donde el resultado es obtenido de manera objetiva. La forma de detección depende del tipo de PCR.
Existen dos tipos de PCR: PCR convencional y PCR en tiempo real. Ambas tienen el mismo principio de multiplicar la región de interés, pero se diferencian en que la PCR en tiempo real es más específica debido al uso de otros elementos denominados sondas y tiene la ventaja de que la detección se va realizando mientras aumenta el número de copias de la región de interés, es decir que la detección se hace en tiempo real permitiendo de esta forma, además de detectar, cuantificar la cantidad de ADN del patógeno que pueda encontrarse en la muestra clínica.
Entre otros tipos de PCR tenemos:
- PCR anidada: consigue amplificar muestras mínimas de ADN a miles de millones de fragmentos, ya que se realiza en 2 PCR consecutivas.
- PCR múltiple: con este tipo de PCR se consiguen detectar varios fragmentos de ADN a la vez, en una sola reacción y con una sola muestra. Esto nos permite detectar varios patógenos en una sola muestra.
- PCR con transcriptasa inversa (RT-PCR): en este caso se extrae ARN a partir de la muestra. Luego, este ARN se convertirá en ADN por un proceso llamado transcripción reversa. En este proceso se utiliza la enzima transcriptasa inversa, la misma que utilizan algunos virus como el VIH, el hepatitis C, entre otros. Además, de detectar virus, este tipo de PCR también nos permite determinar el nivel de expresión de un gen en particular.